La exterior es la casa donde tu alma habita con tu cuerpo; la interior donde Dios debe habitar mas íntimo que todos los íntimos, Dios en compañía de tu espíritu.
La puerta de clausura exterior es signo de la puerta del recinto interior; como aquella no permite a los sentidos del cuerpo vagar por el exterior, esta mantiene los sentidos interiores en sus dominios más íntimos.
de la "Carta de Oro" de Guillermo de Saint Thierry